domingo, 25 de agosto de 2013

SENTADA EN TU PUERTA (7-8-1990)

Estoy sentada en tu puerta
y no puedo definir lo que siento;
no ha pasado tanto
pero parece inmenso
el tiempo desde aquellos días,
son sólo seis años, sólos seis cielos
y te tengo tan vívida,
tu cartera marrón, tu expresión
parecía soberbia, sólo era tímida.
Vos soñabas hacer endocrinología
yo afilaba bisturíes con los sesos,
te acordás? neurocirugía…
Vírgenes de tantas cosas,
de libertad, de sexo, de caídas,
hoy te espero en una puerta desconocida.
Vos, vas a hacer anestesia,
y yo, sólo quiero ser clínica,
hemos madurado nena,
saltando, esquivando, probando,
cayendo, gritando, callando,
la soledad tal vez
nos condujo a nosotras mismas.
La soledad trae cucos en la mano
y galeras con sapos y serpientes,
con serpientes que silban y pican.
Por el haz y el envés aún somos
completamente Violeta y Miryam…
Si es imposible el retorno, el regreso
como leímos en el libro de Dolina
no quiero pisotear lo andado
ni manchar los hechos de otros días.
Solamente queda hacernos sendas nuevas,
seis años, seis cielos después
con otras fantasias…
Estoy sentada esperando tu llegada
como si fuera otra primera vez,
en otra escena,
volver a descubrirte, mujer nueva,
volver a elegirte, por tu esencia.
Aunque como dijo el poeta,
nosotras las de entonces,
ya no somos las mismas.


Martes 7-8-1990



No hay comentarios:

Publicar un comentario